Santo Domingo Oeste. — La llegada de la temporada ciclónica vuelve a encender las alarmas en la Escuela República de Japón, ubicada en la comunidad de Bellas Colinas, sector Manoguayabo, donde más de 600 estudiantes se ven expuestos cada año a inundaciones, charcos y desbordamientos producto de una cañada que atraviesa el plantel escolar.
Lo que debería ser un espacio seguro para el aprendizaje se transforma, con cada aguacero, en una amenaza para la integridad física de los alumnos y del personal docente. A simple vista, la escuela podría confundirse con una laguna o una pequeña Venecia, pero se trata de una institución pública del distrito escolar 15-05, donde las lluvias convierten el recinto en un verdadero campo de batalla contra el agua.
El fenómeno no es nuevo. Cada temporada de lluvias el problema se repite sin que las autoridades competentes tomen medidas definitivas. La cañada que cruza el centro educativo pone en peligro a los estudiantes, quienes en múltiples ocasiones han quedado atrapados por los torrenciales aguaceros. Cuando las lluvias sorprenden sin aviso, el personal docente se ve obligado a despachar a los alumnos, priorizando su seguridad ante la falta de condiciones adecuadas para continuar las clases.
“Estamos ante una situación crítica y reiterativa. Cada vez que llueve, hay que suspender la docencia. No podemos arriesgar la vida de los niños,” expresó un maestro del centro, que pidió mantener el anonimato por temor a represalias.
Pese a las múltiples denuncias hechas por la comunidad y el personal educativo, no ha habido respuestas estructurales por parte del Ministerio de Educación. “Ministros van y ministros vienen, y todos... bien gracias. Nadie hace nada”, lamentó un residente del sector.
La comunidad educativa teme que ocurra una tragedia antes de que las autoridades tomen cartas en el asunto. “No hay que esperar a que pase lo peor para reaccionar. Necesitamos soluciones antes de tener que lamentar pérdidas humanas”, advirtió una madre preocupada.
Desde el centro escolar y la comunidad de Bellas Colinas hacen un llamado urgente al Gobierno central, al Ministerio de Educación y a las autoridades municipales para que intervengan la escuela y resuelvan el problema estructural de manera definitiva.
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